EN BUSCA DEL HIELO NORUEGO
Hay salidas que se programan con tiempo y otras, que se montan en pocos días. Esta
salida ha sido de las segundas, de las que se montan en pocos días.
Un día Silver nos comenta, que
Xavi, Carles y Jordi “el trío calavera” están
por Noruega y que igual podríamos subir y estrenar la temporada de hielo.
Bueno, estrenarla y acabarla...
La idea es buena y motivante. Ferrán y yo nos ponemos a la obra. Uno aprovecha
que le están haciendo obras en casa para poder marchar y el otro, que se pilla unos días de fiesta que le deben.
Nos repartimos tareas, uno
pilla los billetes, otro pilla el bungalow y otro
alquila el coche. Les comentamos la jugada a Jaume, Araceli y A.Valls, que sin pensárselo
mucho, también se apuntan. Seremos nueve en total, vamos, que lo pasaremos
bien.
Llegamos a Laerdal muy tarde y con mas sueño que un jovenzuelo saliendo de
un after. De Oslo tenemos de 4 a 5 horas de coche, dependiendo de cómo este la
carretera.
Por la mañana nos acercamos a buscar información al bungalow del “trío calavera”.
Llevamos muy poca información de la zona, pero estos tres, que se han pasado un
día buscando cascadas, nos ponen al día y nos aconsejan una para comenzar.
MAINFALL 180m, 5
Esta cascada está muy cerca de Lerdal. Tenemos que coger la carretera que
nos lleva a Vindedalen. Nos queda a la izquierda a unos 2’5/3 km. de Laerdal.
La parte de abajo no estaba bien
formada. Se sube bien andando, hasta pie de la cascada principal que está más
arriba, unos 45’. Curiosamente, encontraremos una escalera de hierro para pasar
un resalte de roca. La cascada es muy bonita, tiene un color
amarillento/rojizo. El hielo en los primeros largos estaba muy duro y estalladizo.
Escalas con el fiordo de fondo. El descenso se hace por la derecha, aguas
vertientes. Primero se rapela de arboles, encontraremos algún bagueto y después
hay que montar abalakof.
SELTUNFOSSEN 250m, 4+/5
Esta cascada la encontraremos siguiendo la E16 direccion Oslo. La veremos a
la derecha a unos 15km de Laerdal, es evidente. El coche hay de dejarlo en una
granja y para acceder a la cascada, hay que pasar por una propiedad privada. No
cuesta nada pedir permiso, que nos lo darán con una sonrisa. La aproximación es corta 10’ y la cascada muy
bonita. Primero se hacen unos resaltes fáciles, después una campa larga hasta
encontrar la cascada. El descenso en abalakof y rapel de arboles.
HAUGSGJEL 300m , 4+/ 5
Esta cascada se ve del final del pueblo. Es muy bonita y la actividad en
conjunto, muy buena. Tenemos que coger la carretera dirección el hospital de
Laerdal. Pasar delante de este y la carretera nos deja justo debajo. La
aproximación son 2h de subida y unos 650m de desnivel. Hay un camino en la
parte inicial, pero cuesta de encontrar. Lo mejor es coger y subir directos. Se
sube bien, pero es entretenido. Es una cascada con gran ambiente, situada en un
pequeño circo con vistas al fiordo. El primer largo es el más difícil y como en
el resto de cascadas que hemos hecho, donde el hielo está más duro y
estalladizo. A mí, en conjunto, es la cascada que más me ha gustado de las tres
que hemos hecho en Laerdal. El descenso en abalakof.
HYNDEEFOSSEN 180m, 5
Esta cascada está situada cerca de la estación de esquí de Hemsedal. Es una
cascada preciosa, que llama la atención desde la carretera. Para acceder,
tenemos que pasar Hemsedal y seguir por la carretera 52 dirección Oslo. Veremos
la cascada a la derecha, la pasamos de largo y encontraremos una carreta que
sale a la derecha. La seguimos y nos llevara a la vertical de la cascada.
Por suerte alguien ha pasado antes y ha abierto la traza. La aproximación es
una hora con la traza abierta y si no hay traza, un poco más…
Una vez vista de cerca, la cascada se ve más humana y contrariamente a lo
que pasa normalmente, es más pequeña de lo que parecía de lejos. Aquí nos
juntamos con el “trío calavera” que han madrugado un poco más que nosotros.
Hace unos años ya estuvimos por la zona con el abuelo Valls, Piñol, David….
Me acuerdo que fuimos a Hemsedal a esquiar, para relajar los brazos después de unos días en
Rayukan. Al llegar a Hemsedal vimos la
cascada y todos dijimos: ostras que cascadote, que bonita, que… pero solo se metieron
David y Piñol, jeee…
A primera hora toca el sol y llegamos a pie de vía sudando. Empiezan el trío,
los seguimos nosotros montando reuniones para que no nos acribillen. En el penúltimo
largo empieza a soplar un viento, que aparte de frio, empieza a hacer caer “espidifrin”
a fondo. Entre la empapada saliendo de la reunión, el “espidifrin” de las
narices que no te deja ver y que se congela sobre lo mojado, el bloque de hielo que me ha caído en el
hombro y me lo ha dejado tocado y las manos congeladas, llego a la reunión mas
rallao que un rapero en una ópera. Silver,
tira tú que estoy congelado y me duele el hombro. El chaval me mira con cara
de: yo también estoy jodido de frio. Sin discutir mucho, dejamos el último
largo para otra ocasión y zumbando para abajo. Esperamos en el coche a Ferrán y
Jaume que, no sé si han sido más inteligentes que nosotros, pero si le han
echado más narices jeee…, y si que han hecho el ultimo largo.
Sin darnos cuenta ha pasado la semana, un viaje corto pero intenso, con
momentos e historias que nos las quedaremos para nosotros. Hemos conocido otra
zona de este bonito país, a la que seguro que volvemos…